Los cojinetes metálicos con paredes relativamente gruesas (según la norma DIN 1850) se utilizan en muchas aplicaciones pesadas de la ingeniería agrícola y la maquinaria de construcción.
Los cojinetes típicos son los casquillos de acero y los cojinetes lisos de metales no ferrosos (bronce = cobre + estaño, latón = cobre + zinc), pero también de materiales sinterizados.
Cojinetes metálicos de paredes gruesas
Estos cojinetes suelen estar fabricados con material sólido. Si se realizan mecanizados especiales en el diámetro interior, como la creación de ranuras de lubricación, es obvio que es necesario un determinado grosor de pared.
Resulta difícil imaginar que un cojinete metálico con un diámetro interior de 100 mm y un diámetro exterior de 105 mm (conforme a la norma ISO 3547-1), pueda introducirse a presión en un agujero del alojamiento sin gran esfuerzo y sin riesgo de deformación del cojinete u otros daños en el mismo.
Por el contrario, los cojinetes iglidur son muy cómodos de instalar. En caso de emergencia (en el campo, por ejemplo) todo lo que se necesita es un martillo y un trozo de madera.
Cojinetes plásticos de paredes delgadas
Al principio de muchos proyectos que implican la sustitución de cojinetes metálicos lubricados por cojinetes iglidur libres de mantenimiento, surgen algunas dudas. Siempre se han utilizado cojinetes metálicos de paredes gruesas. Ahora aparece igus y no sólo quiere sustituir un cojinete metálico por un cojinete de plástico técnico, sino que además aconseja reducir el grosor de la pared. Cualquiera de las dos cosas sería difícil de vender por sí sola, pero los casos de éxito logrados hasta el momento demuestran que consiguen optimizar las aplicaciones.
Cojinetes iglidur: una larga trayectoria en tecnología agrícola
Hemos demostrado que los cojinetes de iglidur pueden sustituir a los cojinetes metálicos en aplicaciones de uso intensivo. Hay muchas referencias que apoyan esta proposición, y nuestros productos están también muy bien establecidos en el sector agrícola. Lo demostraremos con un ejemplo.
Descubre el caso de éxito de nuestro cliente, el fabricante de maquinaria agrícola Lemken GmbH que instaló satisfactoriamente cojinetes iglidur dentro de su cultivador.
¿Qué efecto tiene la reducción del grosor de las paredes sobre el desgaste de los cojinetes?
Sólo hay desventajas si todo el grosor de la pared sirve de “reserva de desgaste”. En ese caso, un rodamiento de pared gruesa durará, por supuesto, más tiempo, dada una tasa de desgaste idéntica.
Pero seamos sinceros: ¿hay alguna aplicación en la que se tolere un desgaste milimétrico? En las sembradoras, por ejemplo, no sería posible, tendría consecuencias desastrosas para la siembra. Ningún cliente acepta holguras enormes en sus máquinas.
Un cojinete metálico excesivamente desgastado es muy probable que también haya dañado el eje: pequeños desprendimientos de metal pueden adherirse y erosionar el eje, lo que a su vez provoca un mayor y más irregular desgaste en el cojinete.
Para llegar al fondo de las cosas con respecto a nuestros materiales iglidur, hemos probado el desgaste de los cojinetes con varios espesores de pared.
iglidur G e iglidur J fueron sometidos a pruebas de oscilación de 30 MPa con varios ejes.
Resultados de los ensayos
Cuanto más gruesa es la pared, mayor es la tasa de desgaste.
Una de las causas del desgaste algo mayor es la baja conductividad térmica del plástico. En aplicaciones con altos valores de p x v, esto puede hacer que el material se caliente. Cuanto mayor sea el valor p x v específico en una aplicación, más crítico será.
No hay que preocuparse: la mayoría de las velocidades típicas de aplicación de las máquinas de ingeniería agrícola y de construcción son lo suficientemente bajas como para que no se esperen efectos negativos. Nadie trataría de subir y bajar una cargadora frontal o una cargadora de ruedas completamente cargada lo más rápido posible durante un periodo de tiempo prolongado.
Averigua más sobre el valor p x v
Obstáculos típicos de los ensayos prácticos: cómo superarlos
Debido a que el soporte está diseñado para un diámetro exterior mayor, el cojinete igus correspondiente del mismo diámetro será demasiado pequeño. Esto puede superarse con un adaptador (casquillo intermedio) que compense el grosor de pared que falta. Lo más fácil es retocar el diámetro interior del cojinete metálico original, aunque es ciertamente doloroso reutilizar el costoso cojinete de bronce como mero adaptador.
Conclusión
Las paredes gruesas no hacen que un cojinete sea más resistente al desgaste.
Más ventajas de las paredes delgadas de los cojinetes iglidur:
- Los cojinetes son más económicos, se utiliza menos material y los tiempos de los ciclos de inyección son más cortos. Las paredes más finas también permiten tolerancias más estrechas.
- Si vas a cambiar de cojinete de metal a plástico, es buen momento para cambiar el grosor de las paredes también.
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